Con estas temperaturas nos sobran las ganas de echarnos en la tumbona junto a la playa o la piscina, y dejar que nuestra piel vaya bronceándose hasta conseguir el ansiado tono tostado.
¿Cómo podemos acelerar este proceso y vernos morenos lo antes posible? Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que debemos ser cautos y no cometer locuras para conseguirlo. Proteger nuestra piel es un factor clave para que nuestro bronceado sea más bonito y duradero. ¡Vamos allá!
Sí, existen alimentos que potencian nuestro moreno y nos ayudan a prolongarlo más en el tiempo. ¿Cómo lo consiguen? Gracias a los betacarotenos que, una vez dentro del organismo, se transforman en vitamina A. La vitamina A es la encargada de aumentar la producción de melanina, el pigmento responsable de nuestro color de piel, pelo y ojos. Esta vitamina también protege nuestra piel de las radiaciones solares. ¡Un auténtico 2×1!
¿Cómo reconocer un alimento alto en betacarotenos? Muy fácil, por su color. Las frutas y hortalizas de color rojo, naranja y amarillo son las que más betacarotenos contienen, de ahí que posean ese tono tan particular.
De todos ellos, el alimento estrella para acelerar nuestro bronceado es la zanahoria, ya que es el que presenta mayor concentración de betacarotenos. Si consumimos zanahorias de forma regular un tiempo antes de la exposición solar, podremos conseguir un bronceado más rápido.
Otras buenas opciones si no somos grandes admiradores de la zanahoria son la calabaza, el boniato, el tomate o la sandía.
Aunque a todos nos gusta tomar el sol, debemos tener cuidado con los rayos UVA y UVB. Los rayos UVA provocan el envejecimiento prematuro de la piel (sequedad y arrugas) y los UVB son los que ocasionan las quemaduras. Protegernos frente a estas amenazas será más importante que ponernos morenos a toda costa.
Para cuidar nuestra piel utilizaremos protectores solares en el rostro y el cuerpo. Debemos elegir el protector solar basándonos en nuestro tono de piel y en el tiempo de exposición que vamos a realizar.
Además, aplicarlo con frecuencia será clave para que nuestra piel esté más protegida y, así, el moreno sea más duradero.
Además de aplicarte lociones aftersun que mantienen el bronceado durante más tiempo, un truco que quizás desconozcas es consumir té negro. Tiene un alto contenido en taninas, unas moléculas que nos protegen frente al envejecimiento celular al que está expuesta nuestra piel cuando tomamos el sol. Además, el té negro tiene capacidad antioxidante, lo que ayuda a eliminar toxinas e impurezas y, gracias a esto, el bronceado se adiere mejor a nuestra piel.
Si por algún motivo no te gusta el té negro, tenemos otra alternativa. Podemos aplicarlo directamente sobre la piel (si lo mezclamos aloe vera notaremos un extra de hidratación). Nuestra constancia será premiada y notaremos cómo el bronceado nos acompaña más allá del verano.
Somos la app que te mantiene joven si tienes más de 50 años.