Estamos en pleno verano y eso significa que la mitad del país ya está disfrutando de sus vacaciones. Si eres uno de los afortunados, ¡enhorabuena!

En la playa, la montaña o la ciudad, el verano no es sinónimo de abandonarnos y pasarnos todo el día tumbados en una hamaca. ¡Nada que ver! Sabemos que mantener tu rutina deportiva en esta época del año puede ser todo un desafío.

Por eso, hoy te damos las claves para que puedas adaptar tus prácticas deportivas a las condiciones de la temporada y aprovecharla al máximo. ¡A por ello!

1. Elige las horas adecuadas

Todos sabemos que, en verano, las temperaturas suelen ser más altas durante las horas centrales del día, lo que puede hacer que la práctica deportiva no solo nos produzca más fatiga, sino también que resulte peligrosa.

Lo más adecuado es realizar tus ejercicios temprano por la mañana (antes de las 11:00) o al atardecer, cuando el clima es más fresco y agradable (a partir de las 20:00). De esta manera, evitarás el calor excesivo y reducirás el riesgo de deshidratación o golpe de calor.

2. Mantente hidratado

El calor puede provocar una mayor pérdida de líquidos a través del sudor, por lo que es fundamental mantenerse bien hidratado durante todo el entrenamiento, no solo al finalizarlo.

Bebe agua antes, durante y después del ejercicio para reponer los líquidos perdidos y asegurar un buen funcionamiento del organismo. No importa si no tienes sed, tienes que interiorizar el hábito de hidratarte mientras entrenas. Tu cuerpo te lo agradecerá.

3. Aprovecha el entorno

Saca partido a las bondades del verano y elige actividades acuáticas como nadar, hacer aquagym o practicar yoga en la playa. 

Estas opciones te permiten mantener el deporte sin exponerte al calor extremo y, al mismo tiempo, disfrutar del entorno que te rodea y adaptar el deporte a tu destino veraniego.

4. Viste adecuadamente

Utiliza ropa ligera, transpirable y de colores claros para mantenerte fresco mientras haces ejercicio en verano. Así evitarás que la fatiga llegue tan pronto.

Si vas a hacer ejercicio al aire libre, no olvides protegerte del sol con gorras, gafas de sol y protector solar para evitar quemaduras y daños en la piel. ¡Superimportante!

5. Varía el tipo de deporte que haces

El verano es una oportunidad para explorar nuevas actividades deportivas al aire libre. 

Prueba el senderismo en la montaña, el ciclismo por rutas acondicionadas o el pilates rodeado de naturaleza. La variedad de actividades te mantendrá motivado y disfrutarás de diferentes experiencias enriquecedoras.

Eso sí, si notas que la temperatura se dispara y que la hora se te ha echado encima, entrena en un interior, con buena ventilación y condiciones más favorables.

6. Establece metas realistas

Este es uno de los consejos más importantes que debes tener en cuenta. Ajusta tus objetivos deportivos en función del calor y la energía que tengas en verano y, por supuesto, también del tiempo del que dispongas. Por ejemplo, si sientes que el calor te sobrepasa, reduce la dificultad o duración de los ejercicios.

Es normal que las condiciones climáticas afecten a tu rendimiento, así que establece metas realistas y ve progresando de manera gradual.

7. Entrena con ayuda

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